Evaluación del, para y como aprendizaje: ¿qué es todo esto?

Evaluación del, para y como aprendizaje
Evaluación del, para y como aprendizaje: ¿Evaluar? ¿Valorar? ¿Mejorar? ¿Cuál es la verdadera función de la evaluación?

Evaluación del, para y como aprendizaje

Nuestro estilos de evaluación se ven influenciado o bien por nuestros objetivos o por nuestras necesidades (tiempo/prisa del momento). Entonces, intencional o casualmente, aplicamos:

  • evaluación del aprendizaje
  • evaluación para el aprendizaje, y
  • evaluación como aprendizaje

Veamos de qué tratan cada uno de ellos:

#1. EVALUACIÓN “DEL” APRENDIZAJE

Palabras clave: DE
Objetivo: medir

Esta se enfoca básicamente en medir el aprendizaje del estudiante, contrastando sus resultados con los objetivos trazados en la planificación.

Ejemplos:

  • Ms. Jaque necesita cerrar el periodo académico con las toma de dos pruebas. Por falta de tiempo, decide aplicar pruebas estandarizadas (exámenes para responder o marcar, iguales para todos, que no contemplan diferencias ni necesidades especiales en los sujetos evaluados). Los resultados serán inmediatamente ingresados a los registros, sin mayor análisis de los mismos.
  • Ms. Harris decide realizar una evaluación final de la unidad de estudio. Para ello los niños se organizan en un trabajo grupal, y serán evaluados mediante rúbricas.

Análisis:

El ejemplo 1 es el usualmente empleado en la educación conductista, de estilos universitarios y preuniversitarios (incluso cuando se traten de colegios). Las pruebas estandarizadas  son las más empleadas para este tipo de evaluación, cuyo empleo es lamentablemente el más común, pero no el más adecuado al desarrollo de los estudiantes.  El ejemplo 2 es más positivo, pues la ausencia de la prueba estandarizada permite una variedad de criterios de evaluación.

Podríamos ubicar a este estilo de evaluación comúnmente dentro de la evaluación sumativa(evaluación de cierre), por ser más adecuadas para los términos.

Le atribuiremos a este tipo de evaluación el nivel más básico (nivel 1), por cuanto a la facilidad y simplicidad de su aplicación, como también a su antigüedad (evaluación tradicional o “sentencial”).

#2. EVALUACIÓN “PARA” EL APRENDIZAJE

Palabras clave: PARA
Objetivo: retroalimentar

Ésta va más allá de la simple medición del aprendizaje, pues se enfoca en la retroalimentación con dos objetivos claros:

  • Evaluar para retroalimentar al estudiante en sus aciertos y necesidades.
  • Evaluar para retroalimentar al maestro, con el fin de mejorar el proceso de enseñanza-aprendizaje, desembocando en algunos casos en la re-enseñanza de la materia.

Ejemplo:

  • Ms. Anne toma una práctica de matemáticas. Mientras va una a una, ella solicita a algunos sus niños acercarse para felicitarles por sus aciertos, a la vez de explicarle algunos detalles en los que podría mejorar.  Al término, ella decide re-enseñar y volver a practicar, en conjunto, los puntos en los que más errores se han registrado.
  • Mr. John toma una práctica de gramática inglesa. Al término, sus alumnos y él la resuelven en conjunto y en la pizarra. Mister John decide reforzar algunos puntos en los que más errores se detectaron.

Análisis:

Éste requiere de tiempo adicional, bien sea para evaluar estudiante por estudiante, o para repensar y aplicar una nueva estrategia de enseñanza-aprendizaje que conduzca a mejores resultados. Quizás sea el tiempo el factor por el cual este no suele aplicarse ésta con frecuencia.

Se recomienda este estilo de evaluación para asignaturas o temas basados en habilidades (Matemáticas o Inglés, por ejemplo), donde el maestro debe asegurarse de que éstas sean adquiridas antes de pasar a un siguiente nivel o tema.

Le atribuiremos el nivel intermedio de evaluación (nivel 2), pues no solo mide resultados, sino también los estudia, reflexiona y mejora.

Por su estilo, podríamos ubicarla dentro de la evaluación diagnóstica.

#3. EVALUACIÓN “COMO” APRENDIZAJE

Palabras clave: COMO
Objetivo: guiar y modelar

Ésta se centra en el estudiante como conductor principal de la evaluación, quienes:

  • Establecen sus propios parámetros de evaluación.
  • Se guían de los parametros que establecieron.
  • Se evalúan a sí mismos mediante la autoevaluación y coevaluación.

Ejemplo:

Los niños de la clase de Sociales, crean rúbricas (conoce sobre las rubricas simplificadas, de facil elaboración y evaluación) para un trabajo grupal de investigación, estableciendo colectivamente sus propios criterios de evaluación y seguimiento. Ms. Lidia, maestra del curso, les solicita guiarse de estos, así mantener un clima adecuado de trabajo, además de elaborar un buen producto final. Al término del trabajo colaborativo, los niños realizan una co y autoevaluación, basada en la rúbrica creada por sí mismo. Ms. Lidia, mediante esta evaluación, podrá comprobar el grado de reflexión de sus estudiantes.

Análisis:

Ésta pertenece al tipo de evaluación formativa, pues permite a los niños establecer sus propios criterios de trabajo, guiarse de ellos y cumplirlos con el fin de obtener los mejores resultados. En esta tarea, lo más usual es el empleo rúbricaslistas de cotejo y continuos. Y al igual que la evaluación para el aprendizaje, este tipo de evaluación requiere de un tiempo considerable para formar y moldear a los estudiantes, lo cual es un tiempo muy bien invertido considerando los excelentes resultados que se pueden obtener de ellos, tales como un mayor grado de participación en trabajos en equipo, mejor vivencia de la democracia, respeto, reflexión y otras actitudes en los que maestros y estudiantes se quieran enfocar.

Le atribuiremos el nivel avanzado de evaluación (nivel 3), pues además de medir resultados y reflexionarlos, también permite a los estudiantes establecer metas, guiarse de ellas y conseguirlas.

Y tú, ¿qué evaluación empleas con mayor frecuencia? ¿Cuál procurarás emplear de hoy en adelante?

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